Empresarios sudafricanos se divirtieron cogiendo como cavernícolas a la secretaria Lilly Bell
Su empleo no estaba en juego, simplemente le hicieron llegar la propuesta durante una cena luego de un día en la oficina y ella aceptó, Lilly Bell les confesó que nunca había protagonizado un gangbang, pero que sus amigas sí, sin embargo ella siempre tuvo temor por acabar rota en pedazos pues es dulce, delicada y muy femenina, eso es evidente, pero bajo promesas de tratarla con delicadeza y amor ella aceptó; llegó la noche tal y como fue pactada la orgía y ella un poco nerviosa llegó, se sentó y sus superiores empezaron a tocarla, le quitaron su lencería con amor hasta que sacaron sus mangueras negras y ella se asustó tratando de mamar tantas pollas, pero poco a poco mejoró su desempeño y casi sin darse cuenta estaba con todos sus agujeros recibiendo abominables vergas negras, le gustó sentirse deseada, llegó a disfrutarlo tanto que su algarabía era notoria cuando eyacularon en su bello rostro.